El Tribunal Supremo de Canadá ha invalidado recientemente distintas patentes farmacéuticas sobre la base legal de la ‘Promise doctrine’. La macro empresa Eli Lilly & Co es una de las afectadas por estas sentencias por cuanto ha perdido diversos casos sobre patentes frente a Evista, medicamento para la osteoporosis, favoreciendo así a los productores de fármacos genéricos, desde el punto de vista de Eli Lilly.
Así, Eli Lilly decidió el pasado diciembre acudir al arbitraje para apelar el fallo del Tribunal Supremo bajo el Convenio de Libre Comercio de Norte América (NAFTA) reclamando 100 millones de dólares en concepto de lucro cesante tras rechazar el tribunal en 2011 la patente canadiense para el fármaco Strattera basándose en la ‘Promise doctrine’ según la cual se entendió que dicha patente carecía del requisito de utilidad.
El Dr. Lechleiter se pronunció sobre la cuestión como experto en derecho de patentes diciendo que “es injusto que los jueces de Canadá anulen las patentes de medicamentos por no incluir resultados de pruebas favorables suficientes en la solicitud original, presentada años atrás. Además, añade Lechleiter, los jueces están pidiendo muchas más pruebas de que los fármacos propuestos funcionarán adecuadamente de los que se requieren en otros países desarrollados, violando varios tratados internacionales incluido el tratado NAFTA.
Por contra, Jim Keon, presidente de la Asociación de Fármacos Genéricos ha dicho que las compañías farmacéuticas de productos de marca tienen en Canadá una protección mayor en materia de propiedad intelectual que en otros países, negando la afirmación del Dr. Lechleiter. Finalmente, el arbitraje que solamente puede asistir a la partes en materia monetaria, tiene la última palabra.
Escrito por Antorrio Torres
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